Los empleadores que obliguen a sus trabajadores a firmar su renuncia anticipada o documentos en blanco podrían recibir una multa de 182 mil pesos.
Las empresas que soliciten a los trabajadores una renuncia anticipada o la firma de un documento en blanco para contratarlos, podrían recibir una multa que va de los 12,027 a los 182,818 pesos, sanción que podría multiplicarse por cada trabajador afectado, al menos así lo propone la iniciativa de la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados.
Lamentablemente en México pedir a los trabajadores que firmen sus renuncias de forma anticipada es una práctica recurrente, que de acuerdo con los especialistas nació como una mala respuesta a las malas prácticas legales, generando un círculo vicioso.
Es así que para eliminar estas prácticas, la diputada de Movimiento Ciudadano, Amalia Dolores García Medina, presentó la propuesta que plantea que las renuncias en blanco sean sancionadas de la misma forma en que la Ley Federal del Trabajo (LFT) sancionan la presentación de documentos y testigos falsos.
Pero eso no es todo, pues además de la multa, los empleadores podrían recibir una condena de seis a cuatro años en prisión.
“Desafortunadamente es una práctica recurrente de los patrones o de las empresas el obligar a los trabajadores a firmar documentos en blanco, con el fin de realizar posteriores despidos injustificados sin indemnizarlos, al grado de llegar a integrar dichos documentos en el expediente del empleado para usarlo en el momento que así lo decidan, afectando con ello sus derechos humanos”, indicó la diputada.
La propuesta de la legisladora contempla también facultar a los inspectores de trabajo para que realicen visitas extraordinarias a las empresas para impedir las prácticas de: alterar un documento firmado por el trabajador; exigir la firma de papeles en blanco en la contratación.